Normalmente acudimos a un psicólogo especialista en niñ@s porque estamos preocupados por algo que le ocurre a nuestr@ hij@ que nos desborda o no sabemos manejar, o porque en el colegio nos han señalado que hay algún problema que debería ser tratado por un profesional de la psicología.
Independientemente del motivo de consulta en psicología infantil la terapia se estructura siempre de la misma manera. Para empezar se realiza una evaluación que suele consistir en cuatro sesiones divididas de esta manera:
Una primera sesión con vosotros (los padres) para conocernos, para empezar a entender desde cuándo y cómo surgió el problema que presenta vuestr@ hij@ así como otros aspectos importantes que pueden ser desde cómo afecta dicha dificultad a nivel familiar, en su grupo de amigos, en el rendimiento académico, a cómo es el día a día del niñ@, qué cosas le gustan, etcétera.
Una segunda y tercera sesión con el o la niñ@ para evaluar el problema en sí, es decir, cómo lo está viviendo él o ella, qué le preocupa, si quizá considera que hay otro problema distinto al que consultáis vosotros los padres, cómo le está afectando en el colegio… Para realizar estas sesiones de evaluación con el/la niñ@ empleo materiales adaptados a la edad, por ejemplo con los más pequeños trabajamos directamente sentados en el suelo mediante el juego, el dibujo, empleamos la plastilina, las pinturas, muñecos, juegos de construcciones, cuentos… Todo lo que sea necesario para facilitarle al/la niñ@ su expresión.
Una vez terminada la evaluación se realiza una sesión de devolución de información solo con los padres. En esta se explica los problemas que se han detectado en la evaluación, la forma en la que vamos a trabajar, qué tipo de técnicas vamos a emplear para realizar el tratamiento, se explicitan los objetivos que queremos conseguir con la terapia…
Teniendo ya finalizada la evaluación es el momento de empezar el tratamiento.
En terapia infantil se trabaja tanto con el o la niñ@ como con vosotros los padres, ya que normalmente los padres buscáis pautas de actuación para poder ayudar al niñ@ y que no se cronifique el problema. Dentro de la terapia infantil se busca siempre que el o la niñ@ mejore, así como la armonía familiar. No entendemos la terapia infanto-juvenil sin trabajar con la familia puesto que es el sistema en el que vive el/la niñ@, para que esos cambios sean estables todos los miembros deben estar implicados.
En las sesiones que realizamos con los padres, realizaremos alguna conjunta (ambos padres y yo), o dependiendo del problema, quizá hagamos alguna individual, es decir, la madre o el padre con nosotros, además de las sesiones que realizamos a solas con el o la niñ@. Trabajamos de esta manera sobre todo para emplear de una forma eficaz el tiempo, es decir, si consideramos que puede llevar una hora trabajar determinadas pautas y/o problema con uno de los padres, lo avisamos siempre con antelación en la consulta anterior para que podáis organizaros con tiempo. El objetivo final de todos los tratamientos infanto-juveniles es entender al niñ@ y detectar porqué se comporta así para poder ayudarle desde todos los ángulos posibles.
También es importante subrayar que en algunos casos es recomendable trabajar en paralelo con el colegio para establecer una pautas conjuntas de actuación.
Los problemas más comunes de consulta en terapia infantil son los siguientes:
Problemas en el colegio:
- Acoso escolar
- Bajo rendimiento académico
- Fracaso escolar
- Dificultades de relación con los compañeros
- Problemas de concentración
Problemas de adaptación:
- Separación de los padres
- Cambio de residencia
- Pérdida de mascotas
- Cambio de colegio
- Celos de un nuev@ herman@
Miedos:
- A ir al colegio
- A la oscuridad
- A separarse de los padres
- A las pesadillas
- A algún personaje de ficción
Problemas de conducta:
- Mentiras
- Rabietas
- Negativismo
- Desobediencia
- Reacciones de ira
- Agresividad verbal y/o física
Problemas de alimentación y/o sueño:
- Terrores nocturnos
- Hábitos inadecuados
- Pesadillas
Déficit de atención:
- Con hiperactividad (TDAH)
- Sin hiperactividad (TDA)
Problemas de relación con los otros:
- Timidez
- Problemas de habilidades sociales
- Aislamiento
- Agresividad